23/12/12

DE PETER PAN, NAVIDADES, AÑOS NUEVOS Y COSAS MEJORES


Por Manuel González P

Si Peter Pan viniera a buscarnos una de estas noches lluviosas, le pediríamos por favor que no encendiera la luz. Porque ya no somos los niños que buscaban con él el paraíso de Nunca Jamás. El pobre Peter se encontraría con el fracaso de nuestra madurez, el alma cargada de navidades en gerundio y alguna ceniza gris del tiempo en nuestras sonrisas. Algunas navidades Peter Pan viene a buscarnos y algún desdichado prende la luz. Aprieta el interruptor para dejar desnuda la evidencia de que ya no somos niños. Las navidades ya no son lo que eran. Ya no monto el Niño Dios escondiendo tras el árbol, al madelman guerrillero asaltando a un inocente ángel.

Hoy pateo con el mismo desconcierto la Plaza Mayor invadida de hipoteca social, espuma, árboles huérfanos y niños que se pierden. Ni siquiera me atraganto con las doce uvas, ni dejo mis zapatos abandonados junto a la puerta. Me visitan los fantasmas de las navidades pasadas y vuelan como pavesas los regalos que un 6 de enero me hicieron, junto con los anuncios de colonia, el neón de los supermercados y el suelo de aquel Liverpool lleno de cristales y burbujas. Algunos niños se perdieron devorados por esa serpiente de luces que sale del aparcamiento de unos grandes almacenes.

¿Dónde estará ahora el niño aquel que fuimos y que pocas veces vimos en otros? Probablemente junto a Mowgli cosiendo botas para Nike en algún remoto país asiático, fumando crack en alguna vecindad perdida de Tepito con Huckelberry Finn, quizá su foto navegue en el deleznable negocio de la Red junto con el desnudo de Caperucita... Quién sabe. Tal vez sonríe dormido, de regreso de la cabalgata, en algún vagón de metro atiborrado de hombres y mujeres tristes y solos, que apagan la luz cuando viene Peter Pan. Como diría el buen periodista Pablo Jatto del World Press: "Navidad surrealista la de este año. Hipocresía máxima, manto de cinísmo helado que tapa las visiones mas dantescas de la vida cotidiana, sobre todo la de los niños sin hogar. Esquivos movimientos de la maltrecha economía para comprar regalos, endeudar y olvidarse del problema por un día y respirar.... Malabarismos psicológicos, autosugestión y mentiras piadosas a los niños. La crisis maltrata con esta asfixia simulada, que no será real, si nos esforzamos en mantener con vida la esperanza" Sin embargo este año en la República de mi madurez todavía caben reyes y santos.

 Y para el 2013 les deseo a todos mis amigos:

1) Trabajo fértil, feliz, seguro y bien pagado.
2) Amor honesto, divertido, poderoso y creativo.
3) Salud física y mental, duradera, productiva y reproductiva.
4) Inteligencia libre, comprometida con la libertad y la justicia que no acepte la explotación ni la esclavitud. 5) Unidad entre todos, amigos, parientes, socios, compadres, gremios, pueblos y parejas.
6) Reconciliación con lo mejor de la humanidad, superación de las pesadillas económicas, confianza en la fuerza humana organizada.
7) Éxito sin existismo. Éxito sin pedantería, sin petulancia sin triunfalismo. Éxito que dé éxito a otros, con humildad sincera que es el único éxito real.
8) Descanso... que todos tengan descanso, paz, distensión, vacaciones, diversión inteligente y mucha energía nueva.
9) Estudio, capacitación, aprendizaje. Intenso, nuevo, refrescante, emocionante, lleno de futuro.
10) Reconocimiento y respeto por el trabajo, esfuerzo y contribuciones en la mejoría de lo propio y lo ajeno
11) Ganas de luchar para que la cosa cambie, para que nuestra suerte mejore, para un futuro menos incierto, para que no nos venza la depresión.
 12) Poesía para todo, mucha poesía... desde las sábanas hasta los fideos, desde los libros hasta las charlas, desde lo íntimo hasta lo público... todo y viceversa para siempre.
13) Buena suerte, encanto, ángel, charm y todo lo que signifique ese toque, ese algo azaroso real, mágico, fantástico y maravilloso que hace de la vida, además de moléculas organizadas... eso que hace objetivamente, materialmente, que aquí y ahora, merezca la pena vivirse.